¿Cómo hacer tu propio compost casero?

En jardinería es muy frecuente generar todo tipo de desechos biológicos. El aprovechamiento de los recursos y desechos generados tras diferentes tareas como poda, recortes de setos, corte de maleza y césped etc, puede dar un valor añadido a nuestro trabajo. En este caso vamos a contaros cómo hacer compost casero con los restos de poda, una tarea en la que en numerosas ocasiones se genera una gran cantidad de residuo que posteriormente hay que eliminar. Con este aprovechamiento no sólo te olvidarás de tener de deshacerte de estos restos, sino que además obtendrás un fertilizante 100% casero y ecológico.

Al generar tu propio compost estarás contribuyendo al ciclo de la vida: el aprovechamiento de residuos para continuar con la vida y mejora de nuevas plantas.

Comencemos.

VENTAJAS DEL COMPOST CASERO

Es muy completo y aporta los nutrientes necesarios para las plantas de manera progresiva.

Airea y mejora la estructura del suelo, lo que le convierte en un sustrato más rico y con mayor capacidad de retención de agua.

Mejora la actividad biológica del suelo.

Reduce el uso de fertilizantes químicos.

Ahorra dinero: Al producirlo tú mismo no tiene ningún coste.

Es una medida ecológica: reduce la materia orgánica que va a los puntos limpios de tu ciudad.

¿QUÉ ES LO PRIMERO QUE NECESITAMOS?

La infraestructura que necesitamos es mínima, basta con tener una compostadora o simplemente un lugar donde almacenar los restos que esté alejado de casa. En el caso de la compostadora tendrás un resultado más rápido.

Este recipiente no tiene que ser tan grande como un contenedor, con un espacio de 1m²/1m³ es suficiente. También necesitaremos algún utensilio para airear y remover los residuos.

Para conseguir unos residuos bien triturados os recomendamos el uso de un biotriturador. De esta manera los restos estarán troceados y podremos optimizar mucho mejor el espacio, ya que ocuparán menos volumen y le costará menos descomponerse.

*Es recomendable que esté situado en un lugar llano y con semisombra.

Biotrituradores Garland

¿Qué restos puedes utilizar?

Según los residuos que utilices tardarás entre 4 y 6 meses aproximadamente. Lo ideal para conseguir un compost rico y nutritivo es combinar tanto restos secos como hojas, ramas, piñas, serrines etc, y residuos húmedos: césped recién cortado, hojas verdes, matas etc. Si todos estos restos ya están troceados o triturados su descomposición será más sencilla y de mejor calidad.

*Además también puedes aprovechar otro tipo de desechos que se generan en casa como cáscaras, peladuras de verduras, cáscaras de huevo etc.

¿Cómo mezclamos los residuos?

Una vez que hayamos recopilado todos los restos y los hayamos troceado o triturado debemos depositarlos por capas y alternando residuos verdes con secos.

Cada vez que añadamos nuevos residuos debemos remover la mezcla con un palo u horquilla. Cuando ya no tengamos nada más que añadir bastará con removerlo cada 5-6 días aproximadamente. Esta acción es importante para que la mezcla se airee. Los microorganismos que intervienen en la descomposición necesitan oxígeno.

Si además vives en una zona de clima seco será conveniente que humedezcas levemente cuando detectes que la mezcla está muy seca.

¿Sabías que…?

Además de obtener un gran fertilizante con los residuos del jardín podemos obtener un gran insecticida. En el proceso de descomposición se generan una serie de líquidos llamados lixivados. Estos han resultado ser un gran insecticida y antihongos. Además también protegen a las plantas de infecciones.

Como habrás podido comprobar crear tu propio compost casero es súper fácil, económico y rentable. ¡Disfruta de un jardín bonito con trucos sostenibles!